La serie de detonaciones de walkie-talkies o beepers utilizados por Hezbolá ha dejado también más de 3,200 heridos.
Este miércoles, nuevas explosiones de aparatos de comunicación en áreas controladas por Hezbolá en el Líbano dejaron al menos 20 muertos y más de 450 heridos, según reportes de las autoridades. Los incidentes ocurrieron apenas un día después de que una primera serie de explosiones causara doce muertos y 2,800 heridos en el país.
Fuentes de seguridad indicaron que los walkie-talkies usados por miembros de Hezbolá estallaron en varios puntos, incluyendo el sur de Beirut, Sidón, y Baalbek. “Escuchamos las mismas explosiones que ayer”, relató un testigo en el sur de Beirut, donde se realizaban funerales de miembros del grupo fallecidos en las detonaciones previas.
Algunas de las explosiones se produjeron en automóviles y motocicletas, mientras los milicianos de Hezbolá se desplazaban por la ciudad. En Bekaa Valley, tres personas murieron debido a las explosiones, según la agencia estatal NNA. El Ministerio de Salud confirmó el saldo de víctimas en todo el país.
Los incidentes causaron incendios en viviendas del suburbio de Dahye, en Beirut, y se han reforzado las medidas de seguridad en las zonas afectadas. La Cruz Roja Libanesa informó a través de su cuenta de X (Twitter) que al menos 30 equipos de ambulancias están respondiendo a los sucesos en diversas regiones, incluyendo el sur del Líbano y Bekaa Valley.
El Ejército libanés ha pedido a la población mantenerse alejada de los sitios afectados para permitir la labor de los equipos de emergencia y evitar mayores riesgos en estas zonas bajo tensión.